Ingreso a la Universidad

Gisela Cuamacas

Graduada del Núcleo de Cayambe 

Mi nombre es Gisela Cuamacas, y este año voy a graduarme en el Colegio Técnico Ascázubi como bachiller en Contabilidad. Mi objetivo para cuando salga del colegio es continuar estudiando en la Universidad, me gustaría estudiar en la Universidad Central en Quito, esa es mi primera opción, y la otra alternativa es la Universidad Técnica del Norte en Ibarra. En cuanto a las carreras he pensado en cuatro posibilidades: Administración hotelera y turismo (De lo que he averiguado esta es la carrera que más me gusta, pero sólo hay en Universidades privadas por lo que queda descartada), turismo ecológico, psicología y Derecho civil. 

Por otra parte, a mediados del mes de junio tenemos que dar las pruebas para ser Bachiller, la nota de esas pruebas nos sirve para graduarnos y también para ingresar a la universidad; aunque desde este año – para dar los cupos a las universidades- no sólo consideraran esta nota sino también las calificaciones que hayamos obtenido durante los años del colegio. Pero la Prueba sigue siendo importante por lo que espero tener suerte para sacar una buena nota. Durante este año he seguido un curso preuniversitario los días sábados, y también en el colegio nos están preparando con simuladores de pruebas. 

El obtener un cupo para ingresar a la Universidad Central es difícil porque hay muchos jóvenes de varias provincias del país que quieren estudiar allí; por esta razón se necesita contar con un puntaje excelente. He sabido de chicos que con 900 puntos sobre 1000 no obtuvieron el cupo. 

La Universidad Central es mi primera opción porque una hermana mayor está estudiando allá; así que si tengo el cupo podría vivir con ella y eso sería un gran ahorro de dinero. Pero, por el momento todo es simplemente deseos.

Del Colegio a la Universidad

Belén Guamangallo

Graduada del Núcleo de Quito

Mi nombre es Belén Estefanía Guamangallo Ajila soy estudiante de tercero de bachillerato técnico en contabilidad, pertenezco a la Unidad Educativa Carlos Zambrano Orejuela. En la Universidad deseo estudiar la carrera de Contabilidad y Auditoría.

Lo que me inspira seguir esta carrera es aprender y entender mejor la economía del país y poder buscar soluciones para los sectores más vulnerables, de esta manera poder mejorar la calidad de vida de este grupo de personas. Quiero poder seguir desarrollándome y a la vez trabajar por eso anhelo estudiar en la Universidad Central del Ecuador ya que es una buena universidad y es una institución pública.

Obtener un cupo en la universidad es muy complicado, debemos rendir un examen de ingreso, la calificación que obtenemos en este examen forma parte de la nota final de grado y determina si obtenemos o no un cupo para ingresar a la universidad. Por este motivo debemos prepararnos muy bien. La educación que recibimos en el colegio no es suficiente para poder rendir el examen, por ello se han creado cursos para nivelarnos llamados preuniversitarios, estos cursos tienen costos muy elevados por lo que no todos pueden pagarlos. Las personas que opten por estos cursos deben organizar muy bien su tiempo debido a que deberán cumplir conjuntamente las obligaciones del preuniversitario y las del colegio por lo que el ultimo año de estudios tenemos sobrecargas de trabajos y deberes.

El ingresar a la universidad con un horario factible para poder trabajar es una de las dificultades más grandes para quienes nos graduamos, ya que las empresas creen que no tenemos la suficiente capacidad o experiencia para realizar las funciones que nos encomienden; pero no se dan cuenta que si no nos dan oportunidades para los recién graduados no vamos a poder obtener la experiencia que ellos piden. 

Para mí es indispensable conseguir un trabajo ya que es la única manera en la que puedo seguir estudiando, ayudar a mi familia en lo económico y moral y cumplir mis sueños.

Para los Graduados Núcleo Quito

Graduados del núcleo Quito: desde la derecha, Eric, Joseph, Gabriela y Belén.

Paola Pillajo

Encargada de Becarios de Quito

Este año en el núcleo Quito se gradúan cuatro becarios: Erick Aguirre, Joseph Alvarado, Gabriela Flores y Belén Guamangallo.

En esta siguiente etapa todos desean seguir estudiando, y aunque supone un gran reto el poder continuar con sus estudios debido a las limitaciones económicas y la dificultad de pasar las pruebas de ingreso a la universidad, ellos se han esforzado por ser los mejores estudiantes del colegio y obtener becas para estudiar en preuniversitarios para prepararse para rendir el examen de ingreso a la universidad. Desde ya, algunos están buscando trabajo para poder costear sus estudios de universidad y como fundación auguramos que puedan obtener un cupo en la carrera que ellos anhelan.

El sueño de Erick es estudiar Medicina, Joseph quiere ser Biólogo Marino, Gabriela anhela estudiar Arquitectura, y Belén ansia estudiar Contabilidad y Auditoría. Todos se están preparando para obtener un cupo en una universidad o instituto del Estado.

Para nosotros como fundación es muy satisfactorio ver cómo están a solo meses de terminar el colegio y graduarse, ellos ingresaron a la fundación siendo adolescentes, ahora salen ya jóvenes adultos con nuevas metas, sueños y con más responsabilidades. Confiamos en que todo lo que sembramos en ellos durante estos tres y cuatro años den frutos para que a futuro sean excelentes profesionales, mejores personas y también mantengan su compromiso de ser agentes de cambios positivos en la sociedad.

Les deseamos muchos éxitos en esta nueva etapa, y anhelamos seguir trabajando con ustedes en su nuevo rol de ex becarios. 

Mensajes para los Becarios que se gradúan

Darwin Vásconez

Encargado de Becarios de Cayambe

Este año, en el núcleo, a finales del mes de julio se gradúan cinco becarios: Joselyn Enríquez, Gisela Cuamacas, Pamela Obando, Nelson Quiroz y Cecilia Chimborazo. Con todos ellos hemos compartido buenos momentos a lo largo de los años, a la mayoría los hemos visto crecer, sobre todo a aquellos que han permanecido más tiempo en la fundación. Hay quienes ingresaron siendo niñas y ahora son jóvenes, su semblante ha cambiado así como su forma de ver la vida. 

El año de la graduación para los becarios siempre está cargado de emociones distintas; por una parte, está la satisfacción de sentir que culminan una etapa importante de su vida, que han alcanzado una meta y que por ello sus padres se sienten orgullosos; pero –por otra parte- se encuentra la nostalgia y la incertidumbre, pues saben que ya no verán cotidianamente a la mayoría de sus amigos y compañeros, y que el futuro se les presenta con pocas certezas. 

La aspiración de todos los becarios es continuar estudiando en la Universidad o en el algún instituto; sin embargo, la concreción de este deseo depende –sobe todo- de dos factores, estos son: la obtención de un cupo para ingresar a la educación superior y el contar con el apoyo (Económico) de su familia. 

La obtención de un cupo se torna cada vez más difícil, ya que la oferta educativa no crece al mismo ritmo que la demanda. Es decir, cada año aumenta el número de estudiantes graduados no así los cupos ofertados. En este mismo contexto, los estudiantes rinden un examen (Prueba Ser bachiller) para postular por un cupo. El sistema implementado pretende premiar el mérito, pues quienes obtienen los mejores puntajes tienen más opciones de ingresar a estudiar la carrera de su interés. No obstante, dicho sistema es muy difícil que funcione debido a las diferencias que existe en torno a la calidad educativa entre centros educativos, así como a las brechas económicas de nuestra sociedad (Hay familias que están en la posibilidad de matricular a sus hijos en cursos privados de preparación para el examen y otras que no). 

Por lo expuesto, la mayoría de becarios ve el futuro con mucha preocupación, no saben cómo les irá en el examen, si la nota que alcancen será suficiente para obtener un cupo, y tampoco están seguros sobre si sus familias podrán apoyarles teniendo en consideración que las universidades públicas más cercanas se encuentran en Ibarra y Quito. Los padres desean que sus hijos continúen estudiando, están dispuestos a realizar grandes sacrificios por ellos; empero, la buena voluntad no es suficiente. 

Nosotros (Integrantes de SANE – SOJAE) sentimos una profunda tristeza e impotencia cuando sabemos que alguno de nuestros becarios –por una o por otra razón- no va a seguir estudiando. Conversamos con ellos para animarles, para estimularles a que busquen opciones que les permita combinar estudio y trabajo, o -a su vez- les sugerimos que trabajen un tiempo a fin de generar un ahorro que luego puedan emplearlo en sus estudios. Pero, en el fondo, nos queda la sensación de injusticia, de que –independientemente de los méritos- hay amplios grupos sociales que siguen estando condenados a la pobreza y la exclusión.

Voces de los ex Becarios

Mario Tuquerres

Cayambe, Mayo del 2019 

Hola, soy Mario Tuquerres tengo 25 años y soy ex becario de la fundación SOJAE – Cayambe, siempre estaré agradecido por haberme abierto las puertas y permitirme ser parte de esta gran familia que une a estos países hermanos Japón y Ecuador. 

Después de haber vivido esta bella etapa de la vida de un estudiante de secundaria, me gradué de bachiller en Julio del 2012. Para este año las políticas de ingreso a las universidades públicas del Ecuador habían cambiado, se rendía un examen y dependiendo del puntaje se postulaba para cinco carreras; en mi primer intento no conseguí obtener un cupo por lo que volví a intentarlo dos veces más, pero estos intentos también fueron infructuosos. Sin embargo, durante este tiempo con una cámara casera me dediqué hacer fotografías y a moldear mi idea de crear una página en la red social Facebook y dar a conocer los hermosos lugares de mi cantón Cayambe; fue tanta la acogida que tuve en el primer año que me motivó a seguir con el proyecto y –al mismo tiempo- conocí a varios amigos que también gustaban de este arte, la fotografía, quienes aportaron con sus trabajos a la página creada.

Con el apoyo de mi hermana logré comprar una cámara fotográfica profesional con la cual sigo trabajo hasta el día de hoy.

En septiembre del 2015, luego de haberme preparado en un curso privado para nuevamente rendir el examen, obtuve un puntaje que me permitía soñar con un cupo para la universidad, para mis postulaciones escogí como primera opción la carrera de Diseño Gráfico en la Universidad Técnica del Norte, después de un mes de espera al fin tuve la buena noticia de la asignación del cupo para la carrera que había elegido como primera opción en la modalidad semi presencial y desde abril del 2016 me estoy formando como diseñador gráfico. 

Actualmente me encuentro en séptimo semestre, a tres niveles de culminar mi carrera, durante la semana me dedico a realizar mis tareas, trabajo en un cyber en atención al cliente y en proyectos enfocados en el desarrollo del turismo del cantón Cayambe, aportando con mis trabajos fotográficos.